Dragón rojo en difícil

Cómo derrotar al Dragón rojo en Final Fantasy VII Rebirth en el modo difícil, jefe que aparece en el Templo de los Cetra durante el Capítulo 13: El Templo de los Ancianos al final del laberinto.

El Dragón rojo es un el guardián del templo y aprovecha la gravedad del laberinto para manipular a quien se adentre hasta aquí. Estrategia para derrotar al jefe en difícil o en cualquier otra dificultad del juego.

Preparación

Dragón rojo

El dragón rojo es débil al hielo, por lo que conviene equipar materias gélidas junto a elementales en el arma de cada personaje. Además como invocación podrás elegir a Shiva o Kjata si deseas hacer más daño de hielo.

Otras materias que deberías equipar siempre contra los jefes son una materia curativa y una resucitadora por cada personaje. Siempre puedes usar alguna materia protectora y combinar las materias de área con una de esta o las curativas.


En las ranuras libres puedes equipar las materias según tus preferencias en combate como materias moradas que aumentan los parámetros o cualquier materia con la que normalmente te encuentres agusto combatiendo.

Combate

Al principio del combate comienza usando revitalia/muro a todos y protegiéndote de sus ataques con su aliento tales como vórtice de exhalación detrás de las columnas. Dichas columnas podrás utilizarlas para fatigar al dragón cuando este se encuentre cerca de alguna y la destruyas. Si el jefe se encuentra lejos esperate a que se acerque para hacerlo.

Puedes atacar a la cabeza del dragón directamente con lo que conseguirás que de esta forma también entre en fatiga al bajarle la vida a la cabeza.

Además de ataques con su aliento el dragón rojo puede usar sus garras y colmillos o ataques de barrido con su cola.

Cada vez que esté fatigado deberás aprovechar para aumentar su barra con los ataques como carga perforante para tratar de dejarlo vulnerable.

Cuando lo hayas dejado vulnerable y su salud quede por debajo del 60% el combate cambiará de fase, el dragón echará a volar pudiendo atacar a 3 nuevos puntos débiles: sus 2 alas y su tronco.

Céntrate en sus partes fracturables, empezando por sus alas para conseguir fatigarlo el mayor número de veces posible e interrumpir sus más poderosos ataques como el aliento carmesí, que irá progresivamente aumentando de nivel y de rango, extendiendo el fuego por casi la totalidad del suelo.

El combate seguirá de esta forma hasta que lo derrotes.

Al vencerlo en difícil te dará un manual de combate.